Abogado capitalino presentó acusaciones en su contra, a la que agregó otra por haber dado muerte a un delincuente sin necesidad, tras persecución.
Carabineros a nivel regional y nacional, no emitió declaraciones, y precisaron que en primera instancia el oficial fue absuelto.
Fuente Ladiscusion.cl
Hasta el minuto el futuro del prefecto de Carabineros de Ñuble, coronel Williams Núñez, es una enorme incógnita en cuanto a su continuidad en la institución uniformada, dudas que se refuerzan debido a que ni la Dirección Regional ni Nacional han querido pronunciarse sobre las fuertes imputaciones de falsedad de actos de administración militar, eventual secuestro, falsificación de instrumento público y prevaricación administrativa, que forman parte de una querella presentada el año 2012 en la Segunda Fiscalía Militar de
San Bernardo.
Las acusaciones, que circulaban ya por internet a modo de denuncias informales desde fines del año pasado, fueron recogidas y publicadas por un canal de televisión el pasado miércoles, que le hizo un seguimiento, exhibiendo el eventual uso de un auto fiscal para labores privadas. Estas encuentran por base la denuncia que el ex cabo José Silva Garrido, mediante su abogado, Claudio Cofré Soto, el mismo que sigue el caso del asesinato del estudiante chillanejo Nelson Vildósola, a manos del teniente José Antonio Candia, en un confuso incidente donde le dispararon por ser, equivocadamente, un supuesto ladrón de cajeros automáticos.
José Silva Garrido denunció un accidente que le significó perder tres dedos de su mano, por estar trabajando clandestinamente, según su versión, por orden de Núñez, quien fuera su superior en la 14ª Comisaría de San Bernardo, cargando cajas para una de las tres empresas particulares que pertenecen al actual prefecto de Ñuble.
Accidente
Según el abogado Cofré, en la mañana del 26 de marzo de 2009 Silva recibió la orden de trasladarse hasta la empresa Embotelladora Andina (CCU) para realizar trabajos de pintura y bloques de cemento, junto a dos personas más. Todo por orden de Núñez, quien luego explicaría esas labores como policiales, para justificar la asistencia de otros funcionarios de bajos rangos a trabajar (sin remuneraciones extras según denuncian) a esa empresa.
Ese día, el operador de una grúa horquilla, que trasladaba bloques de cemento, dejó caer la estructura de concreto sobre su mano derecha, reventándole tres dedos.
A raíz de la situación, el afectado perdió el conocimiento y fue trasladado a otro lugar para que el asunto se dilatara y no generara malos entendidos en Carabineros. No se dejó constancia ni registro de lo sucedido. Es decir, se encubrió el hecho, según acusa Silva.
Sólo quedó el antecedente de lo ocurrido en el SAPU, donde fue trasladado en la comuna de Renca. Luego fue enviado al Hospital de Carabineros. Ahí el médico de turno le dijo que debían amputarle los dedos accidentados.
“Lo terrible es que mi representado fue llevado y retenido contra su voluntad por 24 horas en la casa del CPR Carlos Gálvez, en la comuna de Pedro Aguirre Cerda, para que se le pudiera poner paños fríos al asunto y evitar que los superiores de Núñez se enteraran de lo ocurrido”, comentó el abogado.
El cabo Silva precisó que siempre oía a Núñez asegurarle que iba a ser indemnizado y que no lo iba a dejar solo, “pero durante todo ese tiempo en que se tramitaron licencias médicas, el coronel no sólo jamás le cumplió, sino que él mismo tramitó su baja, precisamente, por exceso de licencias médicas”.
Más involucrados
En la querella presentada por Cofré Soto se explicita además que hubo otros funcionarios de rangos intermedios, quienes habrían falsificado firmas (emulando la rúbrica del entonces subprefecto de los servicios) en documentos en donde se hacía presente las lesiones del cabo Silva, firmas que el propio subprefecto negaría haber hecho.
También se destaca la firma hecha por el cabo segundo Víctor Ibáñez, quien actuaba como fiscal ad hoc en la causa, y que habría estampado por orden de un capitán (por orden de Núñez). Sin embargo Ibáñez jamás conoció al accidentado.
Pese a que en la causa, revisada por la Fiscalía Militar, se decidió en primera instancia no sancionar a Núñez, se presentó una apelación en el momento en que Cofré tomó la causa, donde advirtió además falta de diligencias realizadas por los abogados anteriores.
Respuesta de Carabineros
En la Prefectura local declinaron hacer declaraciones, puesto que les ampara a tranquilidad de que se trata de un tema ya judicializado y que en primera instancia absuelve al prefecto Núñez.
Por otra parte, desde la unidad de Comunicaciones de Carabineros aclararon que la baja del cabo Silva obedece no a la cantidad de licencias enviadas, sino a “la “imposibilidad física” para poder cumplir las funciones básicas que demanda el servicio que presta carabineros. “Y respecto de las denuncias aludidas por el señor Silva contra un integrante de la institución, éstas se encuentran siendo investigadas por parte del tribunal competente, al cual (como es costumbre en Carabineros) se entregarán todos los antecedentes requeridos”.
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