SAN CARLOS: GEBRIE PASÓ A SER UN MAL CONCEPTO, UNA MALA PALABRA, UNA GROSERÍA.

El año recientemente pasado, 2020, dejará para la memoria histórica la convivencia con el Covid 19. Cada uno de nosotros podrá contar con el paso de los años, cómo fueron los miedos, la incertidumbre, la ineficacia de un gobierno inoperante, las necesidades, en fin… cada uno guardará su propia evaluación de un año marcado por la inseguridad sanitaria. 

Para algunos otros, dentro de los que me cuento, este año también será inolvidable, porque faltando pocos días para su cierre definitivo, nos regaló la noticia que el ex alcalde Gebrie había sido removido de sus funciones y el Tricel Nacional ratifica el fallo en primera instancia del TER Bio Bio, en lo referido a la remoción de su cargo y también en cuanto a ratificar los cargos por los cuales fue sentenciado e inhabilitado para ejercer cargos públicos por 5 años, lo que a su avanzada edad es una cadena perpetua en cuanto a inhabilidad. 

Gebrie representa en gran medida la anti-política, en cuanto a que llegó a ocupar el principal cargo comunal luego de una lamentable administración del alcalde anterior y se abrió paso ofreciendo control pleno de la administración comunal alcaldicia, situación que a poco andar derivó, como se esperaba, en malos tratos a funcionarios y usuarios, a clientelismo político descontrolado, a negocios que favorecieron sus propios intereses, al mas grosero nepotismo. Gebrie representó y seguirá representando lo peor imaginable en materia de probidad administrativa y al mas absoluto desapego a la decencia. 

Los que estuvimos en la primera línea, desde antes que asumiera su cargo como alcalde, sabíamos bien lo que se venía, lo dijimos en todos lados, lo gritamos a los cuatro vientos y pagamos los costos que significaba enfrentar al electo con un 64% de los votos. Aquí estamos con la certeza de la razón en nuestros dichos, con la presencia valiente pese a las circunstancias. 

Gebrie bien sabe que jamás una calle, ni siquiera un pasaje o una pequeña placita de San Carlos llevará su nombre, porque Gebrie representa la peor vergüenza para nuestra democracia republicana. Jamás ningún alcalde había sido removido de su cargo. Jamás un alcalde salió por la puerta de nuestra municipalidad con la impronta mañosa, aprovechadora y rastrera como fue la salida de Gebrie. 

Para que el ex alcalde llegara a usar el aparataje municipal en su favor, fue necesario el concurso de otros y otras que facilitaron estas acciones, bien sabemos de algunos incondicionales que permanecen en sus cargos. Para que Gebrie alcanzara tal grado de control omnímodo, fue necesario contar con un entramado propicio al interior del municipio. Queda mucho por saber aun, mas allá que bien sabemos de algunos y algunas que conocemos su actuar frente a este nivel de corrupción. 

La reconstrucción y la limpieza debe ser total, sin miedos, sin ánimo de revancha. La recomposición de las confianzas debe ser urgente, porque bien sabemos que el municipio sancarlino es la principal empresa de servicios. 

Gebrie ha pasado a ser un mal concepto, una mala palabra, una grosería. 

Hugo Gebrie Asfura es una vergüenza para nuestra corta historia republicana local. Hugo Gebrie debe saber que: jamás siquiera una miserable placita podrá llevar su nombre. 

Ricardo Müller S. M.